Cada vez buscamos más la inmediatez, sobre todo si hablamos de estética o salud. Los implantes inmediatos y con carga inmediata nos permiten estrenar sonrisa en menos de 12 horas, en comparación con los habituales, que necesitan hasta 8 meses. Sin embargo, el gran reto de estos implantes es lograr el éxito estético, especialmente en la llamada “zona estética”, que es la parte frontal de la boca que mostramos al sonreír. Sobre esto ha impartido una charla el Dr. Francisco Enrile en el Máster en Cirugía Oral, Periodoncia e Implantoprótesis organizado por la Universidad a Distancia de Madrid (UDIMA) y el Instituto de Posgrados Avanzados en Odontología (IPAO).
Con el título “Carga inmediata. Toma de decisiones en el tratamiento del alveolo post-extracción: factores a considerar en la zona estética”, el director clínico de Clínica Enrile ha explicado a los alumnos del máster cómo lograr que el implante dental no pueda distinguirse de los dientes naturales, ni estética ni funcionalmente. “El éxito no sólo se basa en la osteointegración del implante, sino también en su combinación armoniosa y natural con los tejidos y los dientes circundantes”, ha señalado. En este sentido, se ha referido a la denominada reabsorción ósea, un proceso de pérdida de hueso que se da en la cavidad donde estaba alojado el diente antes de su extracción (alvéolo). Está pérdida ósea es más pronunciada en la parte frontal del diente, por lo que puede hacerse muy visible en la zona estética si el dentista no crea las condiciones adecuadas para evitarlo.
El Dr. Enrile ha explicado a los alumnos que para lograr el éxito funcional y estético en los implantes de carga inmediata es necesaria una planificación adecuada, ubicar el implante correctamente y hacer una reconstrucción estética de las encías y el hueso, entre otras acciones. De esta manera, podrán minimizar al máximo los fracasos y complicaciones estéticas, que en muchos casos son evitables.
Los implantes inmediatos y de carga inmediata ofrecen inmediatez y comodidad ya que eliminan el tiempo de espera de las técnicas tradicionales y se realizan mediante una sola intervención quirúrgica. Sin embargo, como afirma el Dr. Enrile, es crucial saber identificar si el paciente es un buen candidato para poder emplear esta técnica, y para ello es necesario un estudio previo en profundidad.