Antes de empezar, queremos que sepas algo: el mal aliento (o halitosis, como decimos los dentistas) no tiene por qué durar para siempre porque tiene tratamiento. De hecho, una vez detectado clínicamente, es decir, de forma objetiva, puede erradicarse de raíz. Y, ahora sí, ¿quieres conocer más sobre esta enfermedad? El mal aliento es un tema tabú del que solemos hablar poco y sobre el que existe un gran desconocimiento. Por eso, adelante, en Clínica Enrile vamos a darte las respuestas que buscas.
Qué es la halitosis
La halitosis se define como un olor desagradable y persistente en el aliento que en la inmensa mayoría de los casos está causado por distintos tipos de problemas bucodentales, como la gingivitis o la periodontitis, o por una higiene oral deficiente. Su aparición se debe principalmente a la presencia de unos gases llamados compuestos sulfurados volátiles, que producen ciertas bacterias que se sitúan especialmente en la parte posterior de nuestra boca, en el dorso de la lengua. Y aunque todos producimos estos gases, hay personas que lo hacen en una cantidad muy elevada. Es entonces cuando empezamos a hablar de halitosis.
En el 90 % de los casos, el mal aliento se origina en la propia boca; mientras que en el 10 % restante tiene su origen fuera de ella, por causas que pueden ser respiratorias, gastrointestinales o metabólicas.
Los síntomas de la halitosis
¿Sospechas que tú o alguien de tu entorno padece esta enfermedad? Puedes tratar de averiguarlo siguiendo estos consejos:
- Pregunta a alguien de confianza. Seguramente no sea plato de buen gusto, pero preguntar a un familiar o amigo si percibe mal olor en nuestra boca puede sernos de gran ayuda.
- El hilo dental no miente. Si tras usarlo en los dientes posteriores observas que tiene un color rojizo o marrón, o tiene mal olor, podrías tener mal aliento.
- Prueba ahora con tu mano. Si das un lametazo a la parte posterior de tu mano y, tras unos segundos, observas que el mal olor prevalece, ahí podrías tener tu respuesta.
- Mírate la lengua en un espejo. ¿Observas una capa blanquecina en la parte posterior? Ese es uno de los lugares preferidos por las bacterias para generar mal olor.
Sin embargo, todos estos puntos son tan sólo indicios, no nos aseguran que realmente tengamos un problema de mal aliento. Para diagnosticar la halitosis es necesario que acudas a tu dentista.
Cómo saber si tengo mal aliento
A través de un diagnóstico profesional podemos saber de forma objetiva si una persona tiene mal aliento y por qué. Los dentistas contamos con varias herramientas para saberlo. En Clínica Enrile, por ejemplo, tenemos una tecnología avanzada llamada OralChroma que nos permite saber rápidamente y de forma fiable de dónde proviene el mal aliento y en qué concentración, por lo que nos ayuda a elegir el tratamiento específico que necesita cada persona. En definitivo, se trata de una especie de test de halitosis que nos saca de dudas y nos da información clave para eliminarla.
¿Cuáles son las causas del mal aliento?
Como ya sabes, en el 90 % de los casos la halitosis se origina en la boca. Y puede ser por situaciones de todo tipo:
- Gingivitis
- Periodontitis
- Caries extensas
- Falta de higiene oral
- Ulceraciones orales
- Xerostomía (boca seca).
- Espacios abiertos interdentales donde se retienen restos de alimentos. Es una circunstancia que se da con frecuencia entre los adultos mayores, motivo por el cual la halitosis está mucho más presente en esta etapa de la vida.
Por el contrario, solo un 10 % de los casos de halitosis tienen su origen fuera de la boca; y ojo, porque en estas ocasiones siempre hay algún problema más serio detrás, como puede ser la diabetes o algún tipo de dolencia hepática o pulmonar. En concreto, cuando las causas son de origen extraoral, pueden ser de tres tipos:
- Causas respiratorias
- Causas gastrointestinales
- Causas metabólicas
¿Sabías que hay diferentes tipos de halitosis?
Dependiendo de la gravedad del caso, se clasifican como ligera, moderada y severa. Además, los dentistas distinguimos entre:
- Halitosis transitoria. Se produce solo en ocasiones concretas. Por ejemplo, tras comer alimentos que producen sulfatos, como la cebolla o el ajo; también puede darse por las mañanas (halitosis matutina) o tras consumir tabaco o alcohol.
- Halitosis genuina o verdadera: el mal olor es real y podemos medirlo e identificar su origen.
- Pseudohalitosis: el paciente cree que tiene mal olor en la boca, pero las pruebas diagnósticas y la percepción de otras personas demuestran que no es así.
- Halitofobia: tras haber tratado la halitosis verdadera o la pseudohalitosis, el paciente sigue creyendo de manera persistente que tiene mal aliento.
Tratamiento para eliminar el mal aliento
La halitosis tiene tratamiento y éste siempre es personalizado. Si sospechas que puedes estar sufriéndola, actúa:
- Empieza por una buena higiene oral
Para eliminar la halitosis debemos comenzar por lo más sencillo y lo más importante: una buena higiene bucodental. Debemos prestar especial atención a la limpieza de la lengua y de los espacios interproximales, con el hilo dental o los cepillos interproximales. Las bacterias causantes de los gases sulfurados suelen concentrarse en la parte posterior de la lengua, por lo que es importante que utilices un raspador lingual o cepillo para limpiarla. Tu dentista o higienista puede darte indicaciones personalizadas para que tu rutina de higiene sea eficiente.
- Visita a tu dentista
Acude a tu dentista para descartar la existencia de alguna enfermedad oral que pueda estar provocando el mal aliento, como la caries, la enfermedad periodontal, la sequedad bucal, etc. Dependiendo del origen y gravedad del problema, podrá darte una serie de indicaciones personalizadas que pueden estar relacionadas, por ejemplo, con la alimentación o la hidratación, al mismo tiempo que podrá prescribirte productos sanitarios específicos para mantener a raya el mal aliento.
Remedios caseros para el mal aliento
Son muchos los remedios que se prodigan por internet para acabar con el mal aliento y, aunque muchos de ellos pueden echarte un cable de forma puntual, has de saber que en ninguna ocasión lograrán acabar con el problema de raíz y que a veces pueden incluso provocarte problemas en la boca y los dientes.
Además de estos consejos, en internet encontrarás decenas de remedios que van desde masticar limones con cáscara, hojas de perejil con clavo, apio, eucalipto y un largo etcétera. Algunos podrían servirte para enmascarar el mal aliento de forma muy temporal y otros, como masticar limones, pueden dañar tu esmalte.
Si sospechas que puedes tener mal aliento y te gustaría salir de dudas o si ya estás convencido de que lo tienes, ponte manos a la obra. Desde Clínica Enrile podemos guiarte durante todo el proceso, desde el diagnóstico objetivo que te ofrecemos gracias a la tecnología OralChroma hasta, por supuesto, la erradicación del problema.