Si últimamente tus dientes parecen más alargados que de costumbre, es posible que padezcas retracción de encías, también llamada recesión/recesiones gingivales. Es una patología vinculada a la enfermedad periodontal que puede afectar a la boca de pacientes de cualquier edad, a pesar de que erróneamente los que las padecen piensan que son un síntoma de vejez. Pero lo cierto es que las principales causas que la provocan nada tienen que ver con el paso del tiempo. El Clínica Enrile trataremos de aclararte todas las dudas que tengas al respecto: por qué aparece, cómo detectarla, cómo tratarla… Te lo contamos todo.
Qué son las encías retraídas
La encía es el tejido blando que rodea a los dientes y su principal función es protegerlos y sujetarlos. Cuando hablamos de encías retraídas, nos referimos a que este tejido se va perdiendo hasta que puede dejar al descubierto parte de la raíz de los dientes. Y en los casos más graves, además de perder encía, también se pierde hueso. Este proceso es gradual y va acompañado de síntomas como la inflamación, el sangrado o la sensibilidad dental, por lo que es aconsejable visitar a un profesional en cuanto se detecte cualquiera de ellos. De no tratarlo lo antes posible, irá a más. Y es imposible recuperar de forma natural los tejidos perdidos.Cuáles son sus síntomas
La retracción de encías no suele ocurrir de un día para otro. Por norma general, se trata de un proceso lento que va dejando numerosos indicios y síntomas por el camino, aunque hay ocasiones en las que aparece de manera brusca; hablamos de las recesiones ocultas que, bajo algún estímulo traumático como cepillado o apretamientos, pueden aparecer en pocos días. Te contamos cuáles son algunos de sus síntomas más comunes para que, en cuanto los detectes, acudas a tu dentista para ponerle freno:- Sensibilidad dental. Cuando la raíz del diente queda expuesta, este se vuelve muy sensible a los cambios de temperatura (frío – calor) cuando ingerimos algún alimento o bebida.
- Riesgo de caries. La raíz de los dientes es una zona muy susceptible para que aparezcan caries. Al haber quedado expuesta sin la protección de la encía, hay muchas posibilidades de que surjan.
- Estética. Cuando las encías se retraen, el diente parece más largo ya que vemos su raíz. En ocasiones y dependiendo de las causas y gravedad del problema, puede afectar a un solo diente, a varios o a toda la boca.
- Pérdida del diente. En los casos más severos, se pierde tanta encía y hueso que los dientes comienzan a aflojarse y pueden incluso soltarse del hueso soporte. A este extremo se llega cuando se ha hecho caso omiso durante mucho tiempo de las señales anteriores. Es decir, casi siempre puede evitarse.
Qué puede causar la retracción de encía
No existe una sola causa por la que las encías se retraigan, aunque una higiene bucodental insuficiente suele estar entre las principales. Pero hay muchas más, entre ellas:- Cepillado agresivo. Si aprietas demasiado el cepillo contra los dientes, los tejidos de las encías pueden inflamarse y provocar retracción. De nada sirve que apliques fuerza en el cepillado, el cepillo limpia por barrido.
- Gingivitis o periodontitis. Las enfermedades de las encías son las principales causantes de las retracciones de encías. Suelen ser las que causan inflamación en ellas por acumulación de placa bacteriana.
- Ortodoncia. La retracción de encía suele ser un efecto no deseado pero bastante común entre los pacientes de ortodoncia, sobre todo en aquellos que tienen encías delicadas.
- Maloclusión. Los dientes desalineados o aquellos que no encajan correctamente la arcada superior con la inferior son otra causa común de retracción gingival. En estos casos, solemos hablar de trauma oclusal.
- No se encuentra entre las principales causas, pero apretar excesiva y constantemente los dientes puede estar detrás de las recesiones gingivales.
- Según un estudio de Dental Traumatology, los piercings en labios y lengua provocan recesión gingival.
Qué soluciones o tratamientos hay para las encías retraídas
En la prevención está la clave. Por eso, es aconsejable que visites a tu dentista de forma periódica. Así, no solo tratará tu retracción de encías (en el caso de que la tengas), sino que además podrá detectar signos tempranos de esta u otras enfermedades periodontales. El dentista utilizará un periodontograma, un instrumento mediante el cual registrará con precisión cuáles son los dientes afectados por una retracción gingival. Puede darse el caso de que se vean afectados uno, varios o todos. Esto dependerá principalmente de la causa que haya provocado tu retracción de encías:- Si está relacionada con un problema gingival suelen ser varios o todos.
- Si está relacionada con un traumatismo causado por aparatos de ortodoncia, por ejemplo, puede afectar solo a un diente en concreto.
Cuáles son los hábitos saludables que previenen la retracción de encías
No existe ningún remedio casero que detenga la retracción de encías, y menos aún alguno que las haga crecer de nuevo. No obstante, sí que existen ciertos hábitos saludables que pueden prevenir que esto ocurra. Te contamos cuáles:- Una adecuada higiene bucodental es imprescindible para evitar que se acumule la placa bacteriana o que aparezcan y se desarrollen enfermedades como la gingivitis o la periodontitis. Para ello, es necesario que te pases el hilo o la seda dental al menos una vez al día, que te cepilles un par de veces y que utilices un enjuague bucal adaptado a tus necesidades. Es muy importante que evites el cepillado agresivo.
- Es imprescindible que acudas a tu dentista periódicamente. Solo así podrás prevenir y tratar cualquier infección o patología antes de que esta se haya extendido por tu boca.
- Férula de descarga. En el caso de que tu retracción de encías esté relacionada con el bruxismo, es importante que utilices una férula de descarga adaptada a tus necesidades. De esta forma, no solo terminarás con el problema de origen (el bruxismo), sino que evitarás que cause otros (retracción de encías, dolor mandibular, jaquecas, etc.).
- Malos hábitos. El tabaco en todas sus vertientes (cigarros, vapers, cigarrillos electrónicos, etc.) es uno de los principales causantes de las enfermedades periodontales, tan ligadas a las retracciones gingivales.